Podemos ver en detalle cómo crece el bebé, cómo se forman sus órganos, cómo se desarrollan sus miembros superiores e inferiores y cómo poco a poco va evolucionando a lo largo de las 40 semanas de su vida intrauterina hasta que está preparado para nacer.
Gracias a esta recopilación de imágenes de alta calidad podemos observar la fascinante creación del ser humano en cada etapa de gestación.
En la cuarta semana de gestación, el embrión tiene dos semanas de edad. Todavía no tiene aspecto humano, pero se pueden distinguir las protuberancias que luego serán la cabeza, el cuerpo y los brazos del bebé.
Comienza a formarse el tubo neural y la médula espinal perteneciente al sistema nervioso central del bebé. También se forma la placenta, que será la encargada de transmitir nutrientes y oxígeno al bebé durante todo el embarazo. Mientras tanto, esa función es cumplida por el saco vitelino, un anexo embrionario, que en desparecerá en las próximas semanas.
Empieza a diferenciarse la cabeza que es mucho más grande que el resto del cuerpo y comienzan a formarse las pequeñas protuberancias que luego serán los brazos y las piernas.
Comienzan a desarrollarse las vesículas ópticas a los costados de la cabeza, que luego formarán los ojos que se ubicarán al frente. Los órganos están en una etapa inicial de desarrollo. Tiene el tamaño de una lenteja, entre 2 y 4 mm, aún así ya se pueden distinguir los brazos con sus manos y las piernas con sus pies.
Ya se puede ver el embrión en una ecografía y escuchar los latidos de su corazón. Ya se ha formado el cordón umbilical que pasará los nutrientes al bebé a lo largo del embarazo. Se empiezan a formar la vesícula biliar, el estómago, los intestinos, el páncreas y los pulmones.
Ha crecido el doble de su tamaño. Ya pueden distinguirse, los ojos, los párpados, la boca, las orejas en la cabeza y pueden reconocerse las piernas y los brazos que sobresalen del tronco, así como los dedos de las manos y los pies. Comienzan a crecer las vértebras y las costillas y su piel es una fina capa translúcida.
Se forman los pabellones auditivos del bebé y comienzan a crearse pequeñas raíces de lo que en el futuro serán los dientes de leche y las uñas. Mide aproximadamente 4 centímetros y tiene 5 gramos de peso.
Las estructuras primarias y los órganos principales del bebé ya están formados, todos sus órganos trabajan aunque todavía les queda bastante para estar completamente desarrollados. El tamaño y peso aproximado del bebé al finalizar el primer trimestre es de 6 cm y 10 gramos. La mitad de su tamaño corresponde sólo a la cabeza.
Su esqueleto, que hasta ahora era cartilaginoso, comienza a solidificarse. Alrededor de la semana 18 es cuando la madre comienza a sentir los movimientos del bebé dentro del útero. Lo que hasta ahora era apenas una sensación de burbujeo se convierte en la certeza de que el bebé se mueve.
Mide 16 centímetros y alrededor de 350 gramos. Sus pulmones comienzan a practicar el ejercicio de la respiración y su sistema digestivo hace lo propio tragando líquido amniótico. Su cerebro cuenta con 30.000 millones de neuronas y está desarrollando las áreas destinadas a los sentidos del gusto, el olfato, la audición, la visión y el tacto.
Se pueden ver los párpados, las uñas y las cejas, aunque estas últimas todavía no tienen color, son blancas. Mide unos 27 centímetros y pesa casi 500 gramos, aunque su grasa corporal es sólo del 1%. De ahora en más irá ganando capas de grasa que le ayudarán a regular su temperatura corporal.
Su cerebro, en continuo desarrollo, experimenta alrededor de esta semana grandes progresos en el sistema límbico, el cerebro medio, que gestiona respuestas fisiológicas ante respuestas emociones. Es un momento ideal para empezar a comunicase con el bebé en el embarazo, si no se ha hecho aún.
Ya puede abrir y cerrar los ojos intermitentemente. Su cuerpo ya es proporcionado y comienza a acumular grasa. Su desarrollo cerebral se produce con rapidez, sus ondas cerebrales son similares a las de un recién nacido y el desarrollo de su oído medio, que regula el equilibrio, le permite diferenciar los cambios de posición dentro del útero. Mide cerca de 30 centímetros de la cabeza a los pies y pesa alrededor de 650 gramos.
Sus oídos se van perfeccionando y el bebé reacciona a los sonidos que le llegan desde el exterior, especialmente a tu voz. Practica el reflejo del pestañeo y reacciona a los estímulos luminosos, al igual que a los estímulos sensoriales cuando acaricias la barriga. Realiza diariamente ejercicios de respiración.
Pesa alrededor de 1700 gramos y mide aproximadamente 44 centímetros. Su estructura pulmonar, aparato digestivo y riñón están perfeccionándose para funcionar fuera del útero. Los pulmones practican respirar, el intestino puede digerir y el bebé traga líquido amniótico y orina.
Gana peso a pasos acelerado, aumentando entre 250 y 300 gramos semanales. Traga y digiere el líquido amniótico en el que flota, así como vernix y demás secreciones. Esta sustancia verde oscura o negrusca es llamada meconio y formará sus primeras deposiciones.
El bebé mide 52 centímetros de la cabeza hasta los pies y pesa cerca de 3,400 kilos. Está preparado para nacer, sin embargo algunos órganos como por ejemplo el cerebro continuará desarrollándose creando millones de conexiones neuronales durante los primeros años de vida.